Que entendemos por entrenador de fútbol profesional
Según la RAE, el término “entrenador” hace referencia a persona que entrena.
Si hacemos referencia a la GRAN ENCICLOPEDIA LAROUSSE, nos dice que dicho término en las agrupaciones deportivas, persona encargada de ejercitar a los jugadores, son por encima de todo técnicos en fútbol y como su nombre lo indica preparan, adiestras, entrenan al equipo ensayando todo aquello que les proporciona luego exactitud y eficacia.
También podemos decir que son los responsables directos de la marcha del equipo en la competición, figura central del grupo, el interlocutor autorizado ante la junta directiva, el que decide las últimas o definitivas instancias de cuantas resoluciones se adopten por el equipo. Y son los que responden en su contrato de los éxitos o de los fracasos de todos los que dan vida técnica al club.
TECNICOS EN FUTBOL: son todos los especialistas en temas futbolísticos: un estudioso del fútbol, entrenador o no, pero preocupado por las cuestiones que conciernen a este deporte.
DIRECTORRES DE EQUIPO: son técnicos en fútbol que podrían encargarse de los cometidos propios de la dirección del equipo sin ocuparse necesariamente de su entrenamiento.
¿Qué significa ser entrenador de fútbol profesional?
Lo primero y principal que debe cumplir alguien que pretenda ser entrenador es amar el fútbol y tener pasión por esta profesión. Y os decimos esto porqué no es una profesión fácil, aunque sí muy bonita. Así que antes de daros todos los requisitos formales, es necesario que seáis conscientes de las dificultades.
A todos los niveles encontraréis presión, bien la que os pongáis vosotros mismos o bien la que os pongan los demás. En muchos momentos estaréis solos y tendréis que tomar decisiones que os harán sufrir en lo más hondo de vuestro interior. Y siempre, siempre, os valorarán por el resultado aunque no seáis 100% responsables del mismo.
Pero tiene muchas cosas buenas. Ser entrenador es poder dedicar tu vida o parte de ella a tu pasión, y eso no hay mucha gente que lo pueda decir. Implica ayudar a los demás: a los jugadores a ser mejores, a los aficionados a disfrutar de su equipo, a los jóvenes a hacer deporte, a sus padres a que disfruten de sus hijos y en general a la sociedad fomentando o no valores en las personas. Y os hablo de esto porque si vuestro objetivo es ganar “dinero” ya habréis empezado a fracasar. El fútbol, como cualquier cosa en la vida debe agarrarse con pasión y como fin en sí mismo. Lo otro es una consecuencia de hacer las cosas bien.
Recordad que nada grande se ha logrado sin esfuerzo y que la suerte es solo la coincidencia de la “preparación” con la “oportunidad”.